Declaración de Liberia
Por Magdalene Kahiu
Monrovia, Abril 2023
Las entidades católicas en la nación de Liberia, en África Occidental, piden al gobierno, a líderes religiosos y a funcionarios de las organizaciones de la sociedad civil que trabajen para crear foros para que los sobrevivientes de la guerra civil de Liberia compartan sus experiencias.
En su comunicado, representantes de la Conferencia Episcopal Católica de Liberia (CABICOL), la Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal de Alemania y AGIAMONDO expresan su conciencia de que la experiencia de el conflicto violento en “las últimas décadas ha dejado profundas heridas en la sociedad liberiana” y que silenciar y marginar a los sobrevivientes de la guerra puede obstaculizar “el proceso de curación. Alentamos a los líderes estatales, religiosos y cívicos a reconocer la responsabilidad colectiva de brindar oportunidades seguras y significativas para que las víctimas y los sobrevivientes cuenten sus historias, se apoyen mutuamente y aboguen por sus necesidades con respecto al proceso de curación”, dijeron.
En la declaración posterior al Taller internacional sobre “Lidiar con el pasado y la reconciliación: aprender a la luz de la experiencia liberiana” indica que se habían encontrado “ supervivientes olvidados, abandonados, aislados e incluso temerosos” de la guerra civil de Liberia.
La nación de África occidental tuvo guerras civiles de 1989 a 1997 y de 1999 a 2003.
“El miedo de las víctimas se agrava cuando falta un reconocimiento público del sufrimiento que ha ocurrido y de las vidas que se han perdido”, dicen los representantes de las entidades católicas en Liberia en su comunicado firmado por el presidente de CABICOL, el obispo Anthony. Borwah, el Vicedirector General de AGIAMONDO, Martin Vehrenberg, y el Dr. Jorg Luer, Secretario General de la Comisión de Justicia y Paz de la Conferencia Episcopal de Alemania.
Señalaron que es prioritario escuchar las historias de los perpetradores de violencia ya que “aquellos que han sido responsables de actos de violencia también necesitan curación. Es importante crear un espacio para explorar y comprender estas realidades, dando la debida prioridad al sufrimiento de las víctimas y sobrevivientes y respetando la memoria de quienes han perdido la vida”